¿Pueden los perros comer harina de almendras?

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Información actualizada el 18 febrero, 2021 por Antonela Borios

Cuando estás comiendo deliciosas galletas, lo más probable es que tu perro esté justo a tu lado, rogando con todo su encanto K9 por un bocado. Quizás se pregunte si puede dejar que su perro coma una galleta con usted. Después de todo, tiene harina de almendras. ¿Es seguro que los perros coman harina de almendras? 

¿Pueden los perros comer harina de almendras?

Los perros pueden comer harina de almendras hecha de almendras dulces, ya que ha sido procesada, cocinada y molida y, por lo tanto, no contiene toxinas ni productos químicos dañinos. 

La harina de almendras se hace escaldando (cociendo) las almendras, quitándoles la piel suave y moliendo la nuez hasta obtener una harina. La harina de almendras es rica en proteínas, pero baja en carbohidratos, lo que la convierte en una opción dietética segura para alimentar a tu perro. 

Si bien los perros pueden comer con seguridad una pequeña cantidad de harina de almendras, no es bueno alimentarlos en grandes cantidades o con regularidad. Además, otros productos de almendras, como la pasta de almendras o las almendras crudas, se consideran riesgosos para los humanos y, sin duda, también serían tóxicos para los perros. 

¿Pueden los perros comer almendras crudas?

Si un perro debe comer almendras crudas o harina de almendras a base de almendras crudas o amargas, ingerirá cantidades fatales de cianuro. Esta toxina dañina es producida naturalmente por semillas y nueces que contienen el compuesto amigdalina, que se convierte en cianuro de hidrógeno.

La mayoría de los productos de almendras que se venden en un supermercado están hechos de almendras dulces tostadas o hervidas. Las almendras dulces son el resultado de una mutación natural de las almendras amargas, que creó una variedad más segura de almendras que tiene un contenido de cianuro mucho más bajo que las almendras amargas o silvestres crudas. Comer solo unas pocas almendras crudas puede causar una toxicidad tan severa en las personas (¡y en los perros!) que se enfermarán gravemente y podrían sufrir una toxicidad fatal. 

La mayoría de los productos comerciales que contienen almendras están hechos de harina o copos de almendras dulces. Las almendras amargas o crudas solo se usan para hacer pasta de almendras especializada que no se vende comercialmente. 

¿Por qué es seguro comer harina de almendras (para personas y perros)? 

La harina de almendras se elabora generalmente a partir de almendras dulces, que tienen un menor contenido de amigdalina y, por tanto, producen menos cianuro. Además, la harina de almendras está hecha de almendras dulces hervidas. El proceso de calentamiento de las almendras elimina hasta el 98 % del contenido de cianuro de la almendra, lo que la hace segura para comer. 

Moler la almendra en harina después de blanquear las nueces rompe aún más las estructuras químicas de la almendra y reduce la cantidad de almendra que se ingiere. Es muy poco probable que usted o su perro se coman una taza entera de harina de almendras de una sola vez, ya que se usa como saborizante en productos horneados en recetas que requieren solo unos pocos gramos de harina de almendras. 

Una galleta para perros que se haya hecho con harina de almendras generalmente contendrá menos de media cucharadita de harina de almendras, que es una cantidad lo suficientemente pequeña como para reducir aún más el riesgo de intoxicación. 

¿Por qué no debe darle harina de almendras u hojuelas a su perro intencionalmente?

Si bien una pequeña cantidad de harina de almendras no es dañina para su perro, es mejor evitar dársela ya que el beneficio no supera los riesgos de envenenamiento. 

La harina de almendras puede ser una rica fuente de vitamina E, fibra y proteínas, pero existen fuentes más seguras para lograr este impulso nutricional sin poner en riesgo intencionalmente la salud de su perro.

¿Qué sucede si un perro come harina de almendras?

En general, un perro puede masticar con seguridad unos pocos gramos de harina de almendras, siempre y cuando esa harina se haya hecho con almendras dulces hervidas. Si la harina es casera a partir de almendras dulces crudas o almendras amargas crudas, la toxicidad aumenta drásticamente ya que el perro habrá ingerido mucho más cianuro. Un perro que come demasiada harina de almendras podría sufrir una intoxicación por cianuro y morir.

El envenenamiento por cianuro a menudo es fatal para los perros, por lo que si su perro ha comido más de una cucharada de harina de almendras (como harina cruda y no como ingrediente en productos horneados), es importante conocer los signos y tomar las medidas adecuadas. 

Signos de intoxicación por cianuro en perros después de comer harina de almendras

Cuando un perro ha ingerido niveles tóxicos de cianuro, puede mostrar los siguientes signos:

  • Salivación y babeo excesivo de la boca.
  • Respiración o jadeo rápido y tenso 
  • Convulsiones y temblores musculares 
  • Parálisis en una o más piernas o en todo el cuerpo
  • Encías de color rojo brillante

Un perro que muestra estos signos está sufriendo toxicidad que ha influido en la capacidad de la sangre para absorber y liberar sangre en su cuerpo. La asfixia comienza a aparecer, razón por la cual el perro respirará rápidamente y se esforzará por respirar. Esta es una muerte dolorosa, y tan pronto como se presenten los signos, el perro debe ser llevado a un veterinario para que lo atienda. 

Otras fuentes que también pueden contener envenenamiento por cianuro

Las almendras no son la única fuente de compuestos que contienen cianuro a los que su perro puede estar expuesto. Las frutas con hueso, como los melocotones y las peras, también son ricas en compuestos que provocan cianuro. Cuando tienes árboles frutales en tu jardín, aumenta el riesgo de que tu perro mastique un melocotón, ingiera el carozo y se coma el corazón, donde se produce el cianuro. 

Los frijoles, las semillas y otras fuentes de cianuro requieren un procesamiento adecuado mediante la ebullición y el horneado para eliminar el cianuro que podría envenenar a las personas y los perros antes de que sea seguro consumirlos. 

¿Qué hacer si mi perro come harina de almendras?

Si su perro ha comido harina de almendras o almendras crudas en cantidades excesivas, es importante que tome nota de todos sus síntomas, llame a su veterinario de inmediato y explíquele lo que sucedió, y lleve a su perro al veterinario para recibir tratamiento de emergencia. 

No intente administrar carbón activado o inducir el vómito, ya que esto no hará más que agotar aún más al perro. Asegúrese de eliminar todos los alimentos o fuentes de agua que puedan activar aún más los compuestos de cianuro en el estómago del perro. El tratamiento dependerá de tu veterinario ahora, así que no pierdas el tiempo con remedios caseros ya que tu perro requiere una intervención especializada para sobrevivir. 

¿Qué puede hacer un veterinario para ayudar a mi perro cuando come harina de almendras?

Si se pregunta qué bien hará un veterinario cuando su perro está claramente ocupado asfixiándose por el envenenamiento con cianuro, sepa que su perro puede salvarse. Hay varios enfoques para tratar a un animal que ha sufrido envenenamiento por cianuro. Estos incluyen la administración de hidroxocobalamina (vitamina B12) y terapia de oxígeno para ayudar a unir las moléculas de cianuro a glóbulos rojos adicionales y excretarlos a través de la orina del perro. 

El protocolo de tratamiento para la intoxicación por cianuro en perros es el siguiente: 

  • Administrar hidroxocobalamina (vitamina B12a) al llegar al veterinario
  • La dosis es de 70 mg/kg administrados por vía IV durante 15 minutos.
  • Administre más hidroxocobalamina cada 15 minutos según sea necesario hasta que los síntomas comiencen a disminuir 
  • Si el perro ha ingerido el compuesto de almendras dentro de los 10-15 minutos antes de llegar al veterinario, el veterinario puede decidir bombear el estómago del perro para limitar la exposición después de administrar la primera dosis de hidroxocobalamina.

El tratamiento de apoyo incluye el tratamiento con oxígeno hiperbárico en el que el perro está expuesto al 100% de oxígeno a una presión atmosférica aumentada, lo que obliga a que la sangre absorba más oxígeno. Esto aumenta las posibilidades de supervivencia del perro.

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